17-04-2024
Si algo bueno tienen los eventos, es para los que nos gustan que nos toquen las palmas, es que uno lleva a otro irremediablemente.
Este fue el caso de la celebración que tuvimos el pasado mes de los cumpleaños de Paula, Janusz y Miguel, en el que éste último nos preparó, con la colaboración de sus concelebrantes, un festín que para los amantes de la buena comida fue una gozada.
A raíz de esto, y como no podía ser otra forma, esto levantó los ánimos de nuestro otro gran cocinero, Pablo, quien retó a Miguel a un duelo culinario que los que somos afortunados, disfrutamos hoy día 17 de abril haciendo de jurado.
Decir que esto es un menú de restaurante de autor es quedarse corto. Algo más tarde de lo previsto, para impaciencia de nuestros estómagos, comienzan a aparecer en la mesa los más deliciosos manjares que en un restaurante de muchos tenedores y muchas estrellas de no recuerdo qué marca de neumáticos podemos encontrar: ensalada con vinagreta de frutos rojos, empanada de setas, tartar de aguacate con salmón, croquetas de bacalao, tortilla de setas, cocochas al pil pil, corvina en salsa marinera, conejo escabechado y filetes de solomillo son los exquisitos platos que han pasado por nuestra mesa. A pesar de que a nadie le entraba ni un bocado más, para el postre siempre hay sitio, y más si es una deliciosa tarta casera.
Se nos ha hecho tan difícil la decisión de elegir el mejor plato y el mejor cocinero, que llegamos a la conclusión de que les nombramos “chef de la casa” a los dos, los condecoramos con sus correspondientes medallas de oro y galardonamos con sus diplomas de honor. Eso sí, proponemos que en una temporadita que esperemos que no sea muy larga, podamos disfrutar del desempate de este reto culinario tan especial.
A duras penas hemos podido arrancar hacia los centros penitenciarios, donde todos los miércoles por la tarde impartimos nuestras actividades. ¡Porque lo cortés no quita lo valiente!